Ingredientes(Para un molde de 23 cm.):
Necesitaremos un recipiente donde quepa el molde porque se hará al baño María dentro del horno y papel de aluminio para forrar bien el molde y que no le entre agua.
Para la base:
- 200 gr galletas tipo digestive.
- 70 gr mantequilla a temperatura ambiente.
Para el relleno:
- 900 gr queso cremoso (tipo Philadelphia).
- 5 huevos M.
- 230 gr azúcar.
- 300 gr de nata líquida 35% materia grasa.
- 1 y ½ cucharadita de postre de vainilla líquida.
Para la cobertura:
- Mermelada de arándanos rojos, a petición del cumpleañero.
Precalentar el horno a 170° con aire.
Ponemos en la thermomix o picadora las galletas con la mantequilla y trituramos hasta que quede una masa arenosa, la ponemos en la base de un molde desmontable engrasado y repartimos bien presionando para que quede compacta. Hornear durante 10 minutos. Sacar y reservar.
Para el relleno batimos el queso, el azúcar, la nata y la vainilla, añadimos los huevos uno a uno mezclando muy bien después de cada adición. Una vez hayamos conseguido una crema homogénea verter encima de la base de galletas, podemos usar la espátula de silicona para reducir el impacto y evitar que se rompa la base.
Forrar el molde con papel de aluminio. Preparar el recipiente con un poco agua hirviendo y meter el molde dentro. Hornear durante hora y media al baño María, si vemos que se dora demasiado por la parte de arriba tapamos con papel de aluminio para evitar que se queme. Pasado este tiempo pinchamos con una brocheta en el centro de la tarta para comprobar que esté hecha, en este caso saldrá limpio.
Una vez hecha la tarta, dejamos enfriar dentro del horno con la puerta entreabierta. Dejar reposar en el frigorífico como mínimo 6 horas, mejor de un día para otro.
Antes de servir cubrir con la mermelada elegida, en este caso de arándanos rojos.
Fuente: Food and Cook